Miles de tambores inundaron ayer las calles de Mula en una noche de gran esplendor para el municipio, la Noche de los Tambores, declarada el pasado año de Interés Turístico Nacional.

A partir de las once de la noche empezaron a llegar los primeros tamboristas hasta la plaza del Ayuntamiento después de cenar embutidos típicos de la tierra, como marca la tradición, en los distintos establecimientos del municipio o en las peñas tamboristas. Poco antes de la medianoche la plaza y calles aledañas estaban repletas de tamboristas ataviados con su túnica negra y su tambor y visitantes, que llegan cada año hasta la localidad atraídos por el esplendor de esta noche, sin igual en toda España.

Un gran espectáculo de luz y sonido marcaron los momentos previos a la llegada de la media noche cuando, el reloj de la plaza marca el momento de empezar a tocar acompañado del sonido de los cornetines y los tambores de la Asociación de Tamboristas.

En ese momento el silencio roto de la tradición inunda Mula hasta las cuatro de la tarde del día siguiente cuando los tambores pararán para dar paso a la procesión de Miércoles Santo.

Los tambores volverán a sonar la mañana del Viernes Santo, desde las 8 hasta las 4 de la tarde y el Domingo de Resurrección desde las 12 del mediodía hasta las 8 de la tarde.

Este año, como viene siendo habitual, han participado de la Fiesta de los Tambores diversas personalidades del ámbito regional y nacional. Este año acompañaron al alcalde de Mula, Diego Cervantes y las autoridades locales, el Delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, el secretario general del PSOE Regional, Pedro Saura, el diputado regional del Grupo Socialista, Antonio Martínez Bernal, el diputado regional del Grupo Socialista, Joaquín López Paágan, el comandante del Acuartelamiento de Sierra Espuña, Juan José Abolí, el artista muleño, Cristóbal Gabarrón, Cris Gabarrón, Miriam Gómez de Cabrera Infante, y los periodistas y escritores, Vicente Molina Foix, Ángel Sánchez Harguindey, Toni Munné y Miguel Hernández, entre otros.

Este año el buen tiempo ha sido, además, el protagonista en la Noche de los Tambores, que en los últimos años se ha visto amenazada por la lluvia y el frío. Sólo a primera hora de la tarde se preveía un viento que ha cesado con la llegada de la noche.

Con motivo de la previsión de la masiva participación de tamboristas y llegada de visitantes se han establecido un dispositivo de seguridad y sanitario de gran importancia, con refuerzos de efectivos de Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil y ambulancias, así como un hospital de campaña para posibles incidencias.