La Guardia Civil de la Región de Murcia ha entregado cerca de 700 piezas arqueológicas y paleontológicas recuperadas en la operación ‘Zehir’ al Museo Ciudad de Mula. Estas piezas, de gran valor histórico, fueron encontradas en un inmueble de Mula durante una investigación sobre robos en casas de campo.
El coronel Jefe de la Zona de la Guardia Civil de Murcia, Francisco Pulido, entregó la colección en un acto que contó con la presencia de Francisco Lajara, director General de Patrimonio Cultural de la Región de Murcia; Gregorio Romero, Jefe del Servicio de Patrimonio, Juan Jesús Moreno, alcalde de Mula y Diego Boluda, concejal de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Mula.
El alcalde Juan Jesús Moreno declaró: «La recuperación de estas piezas es un logro muy importante para nuestro patrimonio cultural. Agradecemos a la Guardia Civil por su diligente trabajo y su colaboración continua con nuestro municipio.»
La operación ‘Zehir’ comenzó el año pasado, cuando la Guardia Civil y la Policía Local de Mula investigaron varios robos con fuerza en viviendas aisladas. Detuvieron a dos sospechosos y, durante los registros de sus propiedades, encontraron una caja con fósiles y otros objetos robados. Las piezas recuperadas, que abarcan desde el Paleolítico al Neolítico, incluyen erizos, bivalvos, pectínidos y ammonites, muchas de ellas en excelente estado de conservación.
El concejal de Patrimonio, Diego Boluda, comentó: «Estas piezas no solo tienen un valor histórico incalculable, sino que también enriquecen nuestro museo y fortalecen nuestra identidad cultural. Este acto subraya la importancia de proteger y preservar nuestro patrimonio.»
El hallazgo fue notificado al Servicio de Patrimonio de la Dirección General de Cultura de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, que determinó la importancia de la colección. Los investigadores también descubrieron que los objetos estaban siendo ofrecidos a la venta en línea a precios bajos, ignorando su verdadero valor cultural.
El Ayuntamiento de Mula y el Museo Ciudad de Mula, ubicado en el convento de San Francisco, agradecen a todos los implicados en la recuperación de estas piezas, que ahora estarán disponibles para el disfrute y el estudio de futuras generaciones.