La Consejería de Cultura trabaja para que se integren en los hallazgos declarados Patrimonio Mundial de la Humanidad, ya que disponen automáticamente de la declaración de BIC
La consejera de Cultura y portavoz del Gobierno regional, Noelia Arroyo, y el alcalde de Mula, Juan Jesús Moreno, informaron hoy sobre el descubrimiento de unas pinturas de arte rupestre esquemático en una cavidad de la 'Cueva de Justo', en Yéchar (Mula).
Según los expertos, las pinturas podrían datar del Neolítico, por lo que fueron hechas hace unos 6.000 años. El hallazgo lo realizaron a finales de enero varios miembros de la Sociedad de Estudios Historiológicos y Etnográficos, quieres también asistieron a la presentación.
Noelia Arroyo destacó que "en una zona tan prospectada como es la Región de Murcia, el descubrimiento de nuevas pinturas rupestres es algo excepcional". Además, las pinturas esquemáticas poseen más detalles de los habituales, como la representación de brazos y piernas en las figuraciones realizadas a base de triángulos, que ayudan a los expertos a desvelar mejor su significado.
Al tratarse de arte rupestre prehistórico, las pinturas adquieren de forma automática la declaración de Bien de Interés Cultural. Asimismo, la consejera de Cultura informó de que "estamos trabajando para que sean adscritas a la lista de pinturas rupestres esquemáticas y levantinas, declaradas Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco, que configuran el denominado Arte Rupestre del Arco Mediterráneo".
Durante la presentación, Noelia Arroyo destacó "la gran importancia histórica y cultural de este nuevo hallazgo, que contribuye al incremento de la nutrida representación de pinturas rupestres que albergan más de un centenar de cuevas y abrigos repartidos por la Región". Añadió que "se trata de una herencia que tenemos el deber de conservar para las generaciones futuras, y para cuyo mantenimiento, difusión y puesta en valor trabajamos desde el Gobierno regional en colaboración con los ayuntamientos". La titular de Cultura también incidió en "la gran labor de documentación, conservación y difusión realizada por todos los expertos de la Región en este campo".
Detalles de las pinturas
Las nuevas pinturas fueron encontradas el pasado 30 de enero por varios expertos que se habían desplazado a la sierra conocida como 'Cejo Cortado', en Yéchar, para acceder a una cavidad que podía contener pinturas rupestres. El equipo estaba formado por la arqueóloga Teresa Fernández, el técnico Pedro Lucas, el ilustrador y estudiante muleño de Arqueología Raúl Campuzano y los miembros de la Federación Murciana de Espeleología, Juan Querol y Vicente Benegas.
Durante su expedición a esta gruta, que resulta inaccesible a pie, vieron pinturas en tres zonas diferenciadas. En el panel principal destacan unas figuras antropomorfas-oculadas compuestas de una especie de hibridación entre antropomorfos bitriangulares y con representaciones oculadas ubicadas a cada lado de la cabeza de la figura. En estas figuras se encuentran superpuestos otros trazos rojos ramiformes (forma de ramas).
Asimismo, bajo estas representaciones se distinguen una serie de digitaciones y líneas en zigzag, además, en el mismo panel, aunque en un estado más deteriorado, hay restos de otra figura similar, así como otros trazos negros y abstracciones irreconocibles.
Además de este panel protagonista, se observan dos paneles más en peor estado de conservación. En uno de ellos pueden distinguirse trazos en zigzag y otras formas por determinar, mientras que en el otro, situado al fondo del abrigo, se vislumbra una figura oculada con más trazos cortos.
Esta iconografía, que han estudiado diferentes autores, aparece asociada a elementos arqueológicos del Neolítico hasta la Edad de Bronce. En este sentido, en la Región se ha documentado anteriormente un tipo de pintura parietal de figura oculada esquematizada en la Cueva de las Enredaderas, en Cieza.
La dificultad de acceso a la cueva no permite plantear un proyecto para que el lugar pueda ser visitado, no obstante, existe la posibilidad de desarrollar visitas para grupos reducidos dentro del llamado turismo espeleológico, que es una nueva modalidad de ocio deportivo en vías de desarrollo.